El elevado coste que supone el envejecimiento progresivo de la población mundial y el alto número de enfermedades crónicas y personas en situación de dependencia, pone de manifiesto la necesidad de promover modelos eficaces de envejecimiento saludable basados en la detección temprana, prevención y preservación de la salud.
Asimismo, el avance de tecnologías como la IA, el procesamiento de datos masivos (BigData), los dispositivos IoT para la monitorización de la actividad y la medición de signos vitales, o la implantación de sistemas 5G para la transferencia de datos masivos a altas velocidades, están abriendo un sinfín de oportunidades para la exploración de nuevos modelos asistenciales.
En este contexto, el Instituto de Biomecánica (IBV) está llevando a cabo el proyecto HLIQUIDO para el desarrollo de soluciones tecnológicas y generación de nuevos indicadores de salud para el seguimiento de pacientes en entornos extrahospitalarios.
En palabras de David Garrido, Director de Innovación en Valoración Biomédica de IBV, “el objetivo principal que persigue este proyecto es investigar en la integración de nuevas tecnologías y metodologías de registro de variables relacionadas con el estado de salud de las personas, en una plataforma digital, y en la explotación de esos datos para generar indicadores de salud y alarmas de eventos adversos que aporten gran valor clínico en el entorno extrahospitalario”.
En el marco de las investigaciones, se está desarrollando una plataforma de registro, almacenamiento, explotación y visualización de datos, estudiando su uso para el seguimiento clínico de la salud de personas mayores en su propio hogar. Las tecnologías integradas en la plataforma son cámaras smartphone y tablet, de fácil uso, tanto para pacientes como cuidadores, que permiten realizar un seguimiento continuado de los pacientes desde la comodidad de su hogar, mejorando el proceso asistencial y permitiendo generar nuevos indicadores clínicos relevantes y alarmas que permitan personalizar las intervenciones y anticiparse en los procesos de recuperación o enfermedades crónicas.
En concreto, se están poniendo a punto modelos que permiten la estimación del nivel de estrés y de fragilidad física, a partir de variables extraídas de la cámara usando IA. Aunque estos modelos se están estudiando con personas mayores, tienen potencial para su uso en general con cualquier tipo de paciente.
Por último, la plataforma dispondrá de diferentes capas de visualización de datos específicas para pacientes, clínicos y cuidadores, permitiendo una mejor comprensión e interpretación de la información.
En concreto, “estas investigaciones permitirán impulsar un modelo de ‘hospital líquido’ basado en la digitalización de los procesos para atender a los pacientes más allá de las barreras físicas de los centros sanitarios y en el uso de soluciones tecnológicas flexibles adaptadas a diferentes patologías, así como al entorno y necesidades de los pacientes” declara Garrido.