Conocer la procedencia de la sidra que se está bebiendo en ese momento, ya es posible. Y para ello, no es necesario más que un teléfono móvil. CTIC Centro Tecnológico y el Consejo Regulador de la Denominación de Origen protegida (DOP) Sidra de Asturias han llevado a cabo un proyecto que a partir de ahora permitirá conocer la trazabilidad de la sidra a través de tecnología Blockchain, éste es ya una realidad.
Saber qué variedad de manzana y en qué porcentaje se usa en cada botella de sidra, de dónde proceden esos frutos, qué día se recogieron y hasta cuándo se procedió al embotellado, es parte de la información que puede consultarse a través de la aplicación móvil desarrollada.
Actualmente, son dos los llagares asturianos (Llagar Castañón y Sidra Menéndez), que ofrecen ya esta información en las etiquetas de las botellas de sidra comercializadas bajo las marcas: Val de Boides (Llagar Castañón); Menéndez Ecológico y Val d’Ornón (Sidra Menéndez), ofreciendo así un servicio de valor añadido a los consumidores.
El acceso a la información es muy sencillo, ya que podrá hacerse bien:
- A través de la url de la app: https://sidradop.ctic.es
- Escaneando el código QR que aparece en las etiquetas comerciales de las marcas colaboradoras Val de Boides, Val d’Ornón y Menéndez Ecológico.
Una vez en la pantalla inicial, se introduce el número que aparece en la etiqueta que se encuentra adherida a la botella. Tras introducir este número, el usuario deberá pulsar el botón “VER TRAZA” y la aplicación le mostrará toda la información sobre la sidra, el origen de la manzana, variedades utilizadas, notas de cata, lote de comercialización y otros datos clave acerca del proceso de elaboración seguido.
El proyecto, une así tradición e innovación, el conocimiento que tiene el Consejo Regulador de la DOP Sidra de Asturias con la experiencia en tecnologías innovadoras de CTIC Centro Tecnológico, la práctica de la elaboración de la sidra con la tecnología disruptiva de Blockchain que consigue aportar al consumidor más información y más fiable.
Además, pone de relieve las posibilidades que ofrece la tecnología Blockchain en el seguimiento de la trazabilidad de los alimentos, aportando una solución innovadora y adaptable tanto a otros productos agroalimentarios como a los de otros sectores, reforzando la seguridad del consumidor final respecto al proceso de elaboración del producto.