Estos controles permiten certificar que el contador funciona perfectamente y que, por lo tanto, da una lectura real
El Instituto Tecnológico de la Energía (ITE) es la única entidad acreditada por ENAC (Entidad Nacional de Acreditación) para efectuar todo el proceso de evaluación de contadores. Estos controles se dividen en tres módulos: B, D y F y el ITE es el único órgano en España que está acreditado para evaluar los contadores en base al módulo D.
Existen dos reglamentaciones, el RD 899/2006 y la ITC 3022/2007, que exigen a los fabricantes de contadores un control de los mismos para poder instalarlos en España. Con estas evaluaciones se certifica el perfecto funcionamiento de estos dispositivos y la veracidad de la lectura.
El ITE también es laboratorio acreditado de ensayos, con lo que puede realizar en sus propias instalaciones todas las pruebas necesarias para la especificación técnica de las evaluaciones. De este modo, un fabricante puede realizar el proceso completo de control con la misma entidad. Además, otros organismos de control pueden acudir a los laboratorios del ITE para efectuar estas pruebas.
Los tipos de evaluación
Los fabricantes siempre deben certificar los contadores en base a dos módulos. El módulo B es de obligado cumplimiento y evalúa el diseño técnico y el funcionamiento del dispositivo. Es el propio fabricante el que debe elegir entre evaluar con el módulo D o el F. El primero, para el que el ITE es la única entidad acreditada, se basa en un examen al sistema de gestión de calidad del fabricante. Es decir, controla la trazabilidad del contador. Mientras, el módulo F examina cada uno de los lotes fabricados.
Reconocido por el Gobierno Chileno
El ITE ha sido reconocido por el Gobierno chileno como entidad certificadora para un modelo de contador que va a comercializarse en este país.
Esta autorización, emitida a través de la Superintendencia de Electricidad y Combustibles chilena, reconoce los procesos de evaluación del ITE y permite al fabricante de este contador vender en el mercado chileno sin tener que repetir los procesos de certificación que ya ha llevado a cabo en Europa.
