El Centro Fedit Gradiant presenta el sistema de Conteo de Personas en las Jornadas de Automatización Industrial en Vigo

– Se trata de un sensor de profundidad que obtiene imágenes de las personas que pasan bajo su campo de visión mediante la utilización de infrarrojos y determina cuáles son las regiones de la imagen que se corresponden con las cabezas de esas personas, para realizar así el conteo.

El Centro Fedit Gradiant (Centro Tecnolóxico de Telecomunicacións de Galicia) ha realizado una demostración del sistema de Conteo Automático de Personas en las Jornadas de Automatización Industrial (JAI). Este sistema automático de conteo de personas basado en sensor de profundidad es un proyecto interno de Gradiant. Se trata del mismo sensor que utiliza el
Kinect, que originalmente se diseñó para jugar a la videoconsola Xbox. Este tipo de sensores proporcionan unas imágenes que contienen información de la distancia a la que se encuentran los objetos presentes en la escena. El sistema que
utiliza Gradiant, es un sensor de profundidad que obtiene imágenes de las personas que pasan bajo su campo de visión mediante la utilización de infrarrojos y determina cuáles son las regiones de la imagen que se corresponden con las
cabezas de esas personas, para realizar así el conteo.
Aumenta la seguridad en edificios o recintos
Una ventaja respecto a usar una cámara convencional es que a este tipo de sensores les afectan menos los cambios de iluminación y funcionan incluso en la oscuridad. Este sistema podría utilizarse, por ejemplo, en un transporte
público para realizar el conteo de pasajeros que se bajan en una determinada parada de metro, etc. Esta información podría ser de utilidad a la hora de diseñar mejores rutas, u optimizar los servicios disponibles. Otra aplicación podría ser contar el número de personas que entran o salen de un establecimiento comercial, un edificio con personal de seguridad, etc. Así, podría conocerse en qué lugares o a qué horas hay más tránsito de personal. En el primer
caso, como consecuencia, se podrían adecuar los horarios comerciales y los productos a ese público determinado y aumentar las ventas. Y, en el segundo caso, mejorar la seguridad de los edificios y de los recintos.

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