AIJU coordina el proyecto GREENZO que desarrolla una tecnología “ecosostenible” para obtener óxido de zinc

El Centro Tecnológico de Fedit, AIJU, coordina el proyecto europeo GREENZO, que tiene como objetivo reciclar los residuos metálicos no férreos derivados de la transformación del zámak para obtener óxido de zinc. El Óxido de Zinc (ZnO) GREENZO presenta una elevada área superficial, hasta cuatro veces superior a la de los ZnO comerciales, lo que ha permitido preparar catalizadores de reformado de etanol de alta actividad.

El Óxido de Zinc (ZnO) se utiliza en el 90% de los procesos catalíticos de la industria química entre otras, como catalizador y soporte de catalizadores. La planta piloto GREENZO ha obtenido ZnO a partir del reciclado de residuos procedentes de la inyección de zámak, que ha permitido obtener catalizadores de reformado de etanol con alta actividad, incluso a bajas temperaturas (250ºC). La caracterización del ZnO, ha demostrado su elevada área superficial, hasta 4 veces superior a la de la mayor parte de los ZnO comerciales. Del mismo modo presenta un tamaño de partícula entre 2 y 3 veces inferior a la de los ZnO comerciales. Estas innovadoras propiedades del soporte derivan en la mejora de propiedades catalíticas del catalizador de reformado de etanol.

El ZnO es un compuesto químico de color blanco, que se obtiene en el proyecto en forma de polvo. Es poco soluble en agua, pero muy soluble en ácidos. Se le encuentra en estado natural en la cincita.

Las particularidades de las propiedades fisicoquímicas del ZnO, lo convierten en un material único con múltiples aplicaciones. Actualmente se utiliza acompañado de cobre y alúmina en la producción de metanol, el tercer producto químico más importante en la industria química. Asimismo, en el ámbito de las energías renovables, también ha sido utilizado con éxito como soporte de catalizadores de níquel y cobalto para la producción sostenible de hidrógeno (reformado de bioetanol), así como en la producción de biodiesel con altos rendimientos.

Otros múltiples usos alternativos a los indicados anteriormente son: como pigmento e inhibidor del crecimiento de hongos en pinturas, cremas o pomadas, como relleno en llantas de goma y como pomada antiséptica en medicina, para eliminar malos olores en zapatos, alfombras, telas, etc., como pigmento protector de la Radiación ultravioleta, como protector superficial del zinc sólido para evitar la oxidación, etc.

Así, las industrias que potencialmente pueden utilizar el ZnO son múltiples y variadas, como la industria farmacéutica, cosmética, o metalúrgica (aleaciones de metal, acerías, galvanización), o los fabricantes de espejos, casas de moneda, componentes y baterías eléctricos, empresas de dispositivos y piezas dentales, cementos dentales (DiaDent, SybronEndo…) y pinturas, entre otras muchas.

En el ámbito del ZnO reciclado obtenido en este proyecto, se ha detectado por análisis químico la presencia de impurezas de alúmina, sílice y óxido de cobre (II). Aunque las cantidades de estos compuestos se pueden considerar pequeñas (< 3%), podrían condicionar significativamente su aplicación final.

El Dr. Chica, Científico Titular del CSIC en el Instituto de Tecnología Química de Valencia, indica: “Cabría resaltar la importancia de su elevada área superficial con respecto a otros ZnO comerciales, así como la presencia de ciertas impurezas como el Cobre (CuO), que podrían resultar interesantes para la preparación de catalizadores eficientes en el reformado de etanol para la producción sostenible de Hidrógeno”.

Este ZnO se aplicará asimismo a la fabricación de artículos de caucho/goma y de EVA expandido, cuyos resultados están siendo analizados.

El proyecto GREENZO, se desarrolla en 3 años, está financiado por la Comisión Europea a través del instrumento financiero LIFE13 ENV/ES/000173. Está coordinado por AIJU y participado por el centro de investigación ITQ-CSIC y las empresas WORT

X
X