_ Los materiales nanoestructurados protegen frente a las colonizaciones bacterianas y destruyen la materia orgánica que se deposita, por ejemplo, en las fachadas de los edificios. _ Esta tecnología ya se aplica en los faros de los vehículos

_ Los materiales nanoestructurados protegen frente a las colonizaciones bacterianas y destruyen la materia orgánica que se deposita, por ejemplo, en las fachadas de los edificios. _ Esta tecnología ya se aplica en los faros de los vehículos de gama alta

Varios Centros Tecnológicos de Fedit (ITC, AIDIMA y AIDICO) trabajan en un proyecto de investigación que tiene como principal objetivo el desarrollo de recubrimientos para materiales con usos exteriores, como productos cerámicos, piedra natural, madera y morteros, que se limpian solos y son más resistentes al envejecimiento. Estos materiales de construcción están sometidos a altos niveles de contaminación y a un envejecimiento prematuro, especialmente en las grandes ciudades, por lo que este proyecto puede suponer un importante ahorro en el mantenimiento de los edificios.    Este tipo de tecnología, basada en la incorporación de materiales nanoestructurados, ya se está aplicando en campos como el de los faros de los vehículos de gama alta. Estos materiales protegen frente a las colonizaciones bacterianas y consiguen destruir por ellos mismos la materia orgánica que se deposita en la superficie y que acelera su deterioro. De esta manera, en el futuro, las fachadas de los edificios podrán limpiarse por sí mismas y los mantenimientos de los edificios serán mucho menos costosos.    Los materiales que se utilizan en este proyecto producen dos efectos. El primero de ellos, es el efecto fotocatalítico, que produce una oxidación que destruye la materia orgánica en contacto con la superficie. El segundo, es el efecto hidrófilo que da lugar a una reducción del ángulo de contacto del agua con la superficie, de manera que en lugar de gotas, el agua forma una lámina que evita la suciedad y facilita la limpieza.    Existen diversos materiales semiconductores que pueden utilizarse como fotocatalizadores, aunque el dióxido de titanio es el más utilizado por su baja toxicidad y mayor estabilidad en disoluciones acuosas. El tamaño de estas partículas de dióxido de titanio no debe superar unos pocos nanómetros si no se quiere incidir en la dispersión de la luz ni modificar la estética del sustrato.    Además del efecto fotocatalítico, también se han tenido en cuenta otros aspectos a la hora de poner en marcha este proyecto, como la adherencia, la estabilidad y la resistencia de los recubrimientos con el objetivo de garantizar las prestaciones de estos nuevos materiales.    Centros Tecnológicos    ITC, AIDIMA y AIDICO pertenecen a la Federación Española de Centros Tecnológicos (Fedit), uno de los principales agentes de la investigación privada en España. Fedit está integrada por 67 Centros Tecnológicos, cuyos ingresos en 2007 ascendieron a 520 millones de euros.

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