El plan de recuperación, transformación y resiliencia de la economía española que ha presentado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, incluye diez políticas tractoras que pretenden incidir en los sectores productivos con mayor capacidad de transformación de nuestro tejido económico y social. La mayoría de estas líneas previstas en el plan, pueden mejorar sus resultados significativamente, si se cuenta con los Centros Tecnológicos como impulsores económicos de la competitividad de las empresas a través de la innovación e investigación aplicada que aportan en sectores estratégicos como los que recoge el plan.
La crisis provocada por la Pandemia del COVID requiere soluciones muy diversas en el plano social, económico, sanitario, tecnológico, laboral, educativo o político, y los Centros Tecnológicos pueden ayudar a que el país salga de ella en menos tiempo y en mejor posición como sociedad. Sólo si somos verdaderamente conscientes como país de la importancia capital que tiene la industrialización y la innovación en la salida de la crisis, podremos acortar los plazos de recuperación de nuestra economía: con más inversión publica y privada en I+D+I, con un tejido empresarial más competitivo y con un mayor peso de la industria en el PIB español .
Los Centros Tecnológicos que pusieron de forma inmediata al servicio de la situación sus infraestructuras, conocimientos y capacidades tecnológicas, han demostrado su cercanía ante las necesidades de su entorno y su rápida capacidad de respuesta ante las exigencias de esta crisis. Son, por tanto, palanca clave en la recuperación económica y social y pueden jugar un papel determinante en las políticas señaladas en el Plan, si se activan de forma adecuada: en la agenda urbana y rural y en el futuro de las ciudades inteligentes; en infraestructuras y ecosistemas resilientes; en la transición energética justa e inclusiva; en la modernización y digitalización del tejido industrial y la pyme, e impulso de una España emprendedora, y en el pacto por la ciencia, la tecnología y la innovación así como en el desarrollo de capacidades relacionadas.
Cifras que confirman su papel impulsor de la competitividad española
Los excelentes resultados que los Centros Tecnológicos españoles están ofreciendo en términos económicos confirman la necesidad de respaldar su modelo, más aún si nos atenemos a los resultados de la última Encuesta SICTI realizada por el Ministerio de Ciencia e Innovación con datos de 2017, donde por primera vez se pueden comparar los indicadores de transferencia de conocimiento de Centros Tecnológicos con otros organismos de investigación.
Según esta encuesta, aunque el peso de los Centros Tecnológicos es considerablemente menor, con menos de un 10% de los investigadores, los Centros participan en el 54% de todos los proyectos de I+D con terceros, son contratados por las empresas que innovan en un 40% y captan el 26% de los fondos de la Unión Europea asignados mediante convocatorias competitivas a organismos de investigación españoles, entre otros datos.
Desde Fedit, queremos hacer un llamamiento al presidente del Gobierno para que no pierda la oportunidad de contar con los Centros Tecnológicos españoles, ya que tienen mucho que aportar y su predisposición y compromiso ha quedado significativamente evidenciado a lo largo no sólo de esta crisis sino de toda su historia.
