La Federación Española de Centros Tecnológicos acaba de celebrar su VII Asamblea General Extraordinaria (AGE) en Madrid con un sólo punto del orden del día: establecer el punto de partida para consensuar una propuesta de indicadores que midan la excelencia de los Centros Tecnológicos. Esta iniciativa responde a la necesidad de realizar un proceso de reflexión sobre un sistema realista que permita la evaluación del desempeño de los Centros en consonancia con su naturaleza y modelo, bien peculiar y bien diferenciado de otros organismos de investigación de carácter público y que viene marcado principalmente por los servicios de investigación y transferencia de conocimiento que prestan a las empresas en su día a día. Precisamente es esta cuestión poco reconocida por el Gobierno, la especificidad del modelo que los Centros Tecnológicos representan, la que motiva principalmente el establecimiento de estos criterios consensuados de excelencia ya que no al no ser ni empresas ni organismos públicos y presentar unas peculiaridades que no suelen ser tenidas en cuenta de una forma equiparable en los requisitos incluidos en los programas de investigación diseñados, salen perjudicados normalmente en su financiación.
Del contacto que Fedit mantiene con el Ministerio de Economía, Industria y Competitividad, así como de algunas propuestas que se vienen planteando desde el Gobierno como el borrador del Plan Estatal de Investigación Científica y de Innovación 2017-2020, que incluye iniciativas como el Programa de Fortalecimiento Institucional de Centros o la Red Cervera, también incluida pero no desarrollada en los pasados Presupuestos Generales del Estado para 2016, se constata la intención de la Administración central en avanzar en la medición de la actividad de los Centros Tecnológicos incluyendo nuevos baremos más allá de los incluidos en el Registro Estatal de Centros del Ministerio con el fin de detectar la excelencia entre estos organismos de investigación privados.
Sin embargo existe una gran preocupación entre este colectivo ante la ausencia de información sobre qué proceso de evaluación pretende aplicar el Ministerio y si éste pudiera ser similar al que mide la actividad de los organismos de investigación públicos, cuando tanto la naturaleza como los objetivos, actividad y resultados de los Centros Tecnológicos son extremadamente diferentes. A tal fin, Fedit ha decidido celebrar una Asamblea Extraordinaria para consensuar con los asociados unos indicadores de actividad realistas y que evalúen efectivamente el desempeño de su actividad e impacto en la mejora de resultados de las empresas e industria para la que trabajan gracias a la innovación que les aportan.
Con las aportaciones obtenidas tras la reunión de la Asamblea celebrada, el Consejo Rector de Fedit elaborará una propuesta de indicadores de excelencia de Centros Tecnológicos y argumentos sobre los mismos que llevará a las instancias procedentes del Ministerio de Economía. Se pretende, por tanto, que sirva de base para avanzar en cualquier criterio que por su parte se quiera incluir en las iniciativas en que puedan desarrollar para conectar el conocimiento científico con la innovación lo cual no va a poder ser efectivo sin cambios drásticos sobre un sistema que no está funcionando como se querría.