El Centro Tecnológico ITG ha recibido en Bruselas el premio europeo Roger Léron a la Innovación en la Transición Energética 2025 por su trabajo en la iniciativa CEL RURAL, donde desarrolla soluciones tecnológicas para la gestión inteligente de la energía. Se trata de un galardón que otorga la Federación Europea de Agencias y Regiones para la Energía y el Medio Ambiente (FEDARENE), y es uno de los pocos premios independientes que supone el reconocimiento de profesionales del sector a personas e iniciativas que contribuyen a la transición energética.
Y es que, en el último año, el Centro Tecnológico gallego ha impulsado la implantación de cuatro CEL (comunidad energética local) en municipios de España y Portugal gracias a sus soluciones tecnológicas para la gestión inteligente de la energía. Las CEL representan un modelo energético descentralizado, sostenible, seguro y rentable donde los vecinos generan y gestionan su propia energía, ahorrando hasta el 20% al año en la factura de la luz de cada hogar. La tecnología ITG da, en este caso, respuesta a dos necesidades que se dan en España para cumplir con los objetivos de la agenda 2030: reducir la dependencia energética (que es de casi el 70%) y sustituir combustibles fósiles por energías renovables.
“Este premio es un reconocimiento a más de 15 años desarrollando soluciones innovadoras que, basadas en digitalización e IA, contribuyen a la descarbonización y eficiencia energética”, ha declarado Santiago Rodríguez Charlón, director de la división de Energía de ITG. “Más de 3.000 suministros energéticos digitalizados, más de 500 servicios de consultoría energética en empresas y la colaboración en I+D+i con más de 100 entidades internacionales nos permite tener muy claros los próximos pasos: generación energética distribuida, redes eléctricas inteligentes, almacenamiento, flexibilidad de la demanda, ciberseguridad y computación cuántica”.
Una nueva comunidad energética en Moeche
Tras el éxito de la puesta en marcha de la Comunidad Energética Local de Xermade en enero de 2025, que permitirá a los habitantes del municipio lucense gestionar la energía que producen, recientemente se ha dado a conocer la resolución de la nueva convocatoria. Así, el municipio gallego que ha resultado seleccionado para la implantación de una nueva CEL ha sido Moeche.
De esta forma, el ayuntamiento de la comarca ferrolana contará con una comunidad energética desplegada en el marco de esta iniciativa, que será gestionada con tecnología desarrollada por ITG. Este piloto se unirá a los cuatro ya existentes en el marco de CEL RURAL, ubicados, concretamente, en Xermade (Lugo), Fontiveros (Ávila), Culatra (Algarve) y Vila Verde (Braga), estas dos últimas en Portugal.
Capacidades en energía y redes inteligentes
Las líneas de trabajo del Centro Tecnológico ITG en el desarrollo de soluciones tecnológicas para el sector energético se centran en cinco ámbitos: el aprovechamiento del hidrógeno verde, el desarrollo de las redes eléctricas inteligentes, la viabilidad del almacenamiento energético, el impulso del autoconsumo y la aplicación de la inteligencia artificial predictiva en la gestión de las energías renovables. Todas ellas están alineadas con objetivo europeo de incrementar las energías de origen renovable desde el 23% actual hasta el 40% en 2030.
Para lograrlo, ITG acaba de llevar a una ampliación de su laboratorio de energía y redes inteligentes, una infraestructura que utiliza tecnología predictiva para simular el funcionamiento y rendimiento energético de cualquier entorno, desde el barrio de una ciudad a un polígono industrial o infraestructuras como grandes hospitales o industrias, mejorando y disminuyendo el coste energético global.
La ampliación del equipamiento ha permitido potenciar la línea de investigación en hidrógeno renovable gracias a la instalación de un sistema que genera este gas mediante electrólisis de agua utilizando parte de la electricidad renovable sobrante en el edificio para disociar la molécula en hidrógeno y oxígeno. Este hidrógeno está siendo utilizado, bien para revertir el proceso y generar de nuevo energía que alimente al edificio, o bien para evaluar su empleo como combustible verde en movilidad terrestre o aérea (drones).
Además, ITG está ampliando la instalación fotovoltaica y la capacidad de almacenamiento energético, de forma que se espera que el edificio sea 100% autosuficiente a nivel energético e, incluso, pueda compartir hasta un 50% de la energía sobrante con otros edificios de dentro y fuera del complejo de Cidade das TIC, donde se ubica este laboratorio, lo que sentaría las bases para la eventual creación de una nueva Comunidad Energética Local gestionada desde el propio centro y con tecnología ITG.