La industria agroalimentaria está en continua transformación y es, por eso, que el Centro Tecnológico Nacional de la Conserva y Alimentación (CTNC) tiene en marcha seis proyectos de investigación que fomentan la innovación e incrementan la competitividad consolidando, así, la excelencia en la industria alimentaria, pilar fundamental del crecimiento económico regional.
La sostenibilidad, la seguridad, la accesibilidad y los productos alimentarios cada vez más naturales son algunas de las exigencias de los consumidores actuales cada vez más preocupados por la composición de los alimentos y su evolución, concienciados de eliminar de sus dietas ingredientes que perjudiquen menos al organismo.
La inversión en I+D+I posibilita dar respuesta a las preferencias más demandadas por la población y, para hacer frente a estos retos, el CTNC trabaja en diferentes proyectos, subvencionados por el Instituto de Fomento de la Región de Murcia bajo el acrónimo ET1APLAUSO, ET2FRESACAPS, ET3OXILCLEAN, ET4QUITOSAN, ET5BIOPERSERV y DIGISOST.
El ET1APLAUSO es un proyecto de investigación conjunto con el CETEC cuyo objetivo es la sustitución de plásticos de origen fósil por otros biobasados y reciclables
Para ello, y según ha explicado la responsable de Tecnología del CTNC, Presentación García, “hemos utilizado como sustrato subproductos industriales para hacer una valorización de residuos agroalimentarios consiguiendo envases con propiedades antioxidantes y antimicrobianas”. Recientemente, técnicos y responsables de ambos centros han comprobado, con éxito en la Planta Piloto del CTNC, el desarrollo de filmes biodegradables activos obtenidos a partir de la valorización de subproductos de la industria agroalimentaria.
ET2FRESACAPS, una investigación sobre encapsulación y microencapsulación en extractos de fresa cuyo objetivo tal y como lo explica García “es extraer compuestos de interés de los residuos mediante diferentes técnicas verdes, entre ellas, extracción asistida por microondas, extracción mediante fluidos supercríticos, entre otros, para la obtención de compuestos bioactivos de subproducto de fresa mediante la utilización de diferentes tecnologías sostenibles y económicamente viables. Posteriormente, preservar para evitar posibles degradaciones, estos compuestos bioactivos mediante microencapsulación de los compuestos de interés con materiales encapsulantes”.
ET3OXICLEAN consiste en la aplicación de tecnologías de oxidación avanzada para el tratamiento de contaminantes específicos presentes en este tipo de aguas.
El objetivo de la investigación es, por un lado, y según explica Sofía Martínez, técnico del departamento de Medioambiente del CTNC, “facilitar el cumplimiento de la normativa en cuanto a la reutilización de aguas residuales depuradas procedentes de la industria agroalimentaria, garantizando su calidad microbiológica y la eliminación de contaminantes emergentes presentes en ellas”. Por otro, tratar en línea aguas específicas del proceso de producción de estas industrias que incluyen fases de recirculación que son susceptibles de contaminación por pesticidas, para evitar que estos contaminantes puedan comprometer la calidad final del producto comercial aplicando dos tecnologías de oxidación avanzada para el tratamiento de estas aguas que son la fotocatálisis y la electro-oxidación.
El proyecto ET4QUITOSÁN investiga dar una segunda vida a los desechos vegetales que no tienen valor comercial y que pueden originar problemas como la emisión de gases efecto invernadero. El CTNC utiliza el proceso de fermentación de restos vegetales con el fin de obtener componentes sostenibles para el sector del mueble y de la alimentación.
Otro de los proyectos denominado ET5BIOPERSEV tiene como finalidad sustituir aditivos de síntesis química por bioconservantes, garantizando la seguridad alimentaria en productos cárnicos y estudia el uso de bacteriocinas como conservantes alimentarios de origen natural.
“Las bactericionas son péptidos, producidos por múltiples bacterias, que presentan la ventaja de no tener efectos nocivos para el ser humano”, tal y como explicó José Fernández, responsable del laboratorio de Microbiología y Seguridad Alimentaria del CTNC, quien añadió que “con este trabajo, pretendemos buscar microorganismos productores de bacteriocinas en diferentes fuentes naturales para que puedan ser empleadas en la industria alimentaria”.
A través del proyecto ‘DIGISOST’, “ayudamos al sector agroalimentario a acelerar su sostenibilidad y transformación digital”, afirmó Ángel Martínez, coordinador de la OTRI del CTNC.
La productividad, la sostenibilidad, la trazabilidad o la exigente legislación son retos de un futuro inmediato a los que se enfrenta el sector y que la digitalización acelera. La necesidad de aumentar la producción ante el crecimiento demográfico o de combatir el cambio climático exige limitaciones cada vez mayores de recursos escasos como el agua, lo que exige considerar la sostenibilidad en todos los procesos. Además, debe satisfacer las crecientes demandas de información de los consumidores (origen, trazabilidad del producto, etc.), así como el compromiso medioambiental en la producción.
El objetivo general del ‘Digisost’ es hacer llegar al sector alimentario de la Región de Murcia, por medio de las distintas acciones como vigilancia tecnológica, transferencia de conocimiento, etc., estos importantes desafíos, y la transición hacia una economía digital aplicándola a todas las fases de la empresa para crear un tejido industrial más eficiente, sin olvidar nunca la sostenibilidad de este.