El Centro Tecnológico CTC ha completado el mejor ejercicio desde su fundación en el año 2000. El liderazgo y participación en múltiples proyectos de carácter europeo, así como su consolidación como socio tecnológico de referencia para las empresas, han permitido al centro cántabro sostener senda del crecimiento y elevar un 12% su facturación directa en I+D+I.
Todo un hito para la entidad que contempla intensificar aún más su dinámica de crecimiento en 2024. No en vano, espera cerrar el año con un incremento del 30% sobre los resultados de 2023 y alcanzar una facturación directa de 2 millones de euros.
La presentación tanto de los resultados definitivos del año pasado como de las previsiones de actividad para este curso se ha realizado durante la reunión del Patronato de CTC. “Nuestra participación en diversos proyectos europeos resulta crítica para consolidar nuestra trayectoria ascendente”, indicó Beatriz Sancristóbal. “En los últimos seis meses, hemos firmando nuestra adhesión a cinco iniciativas internacionales y eso repercute positivamente en todas las áreas del centro”, concluyó la directora general del único Centro Tecnológico de Cantabria.
Más allá de su incuestionable impacto económico, formar parte de distintos consorcios internacionales incide directamente en las capacidades de CTC para resolver los retos tecnológicos que plantea el tejido productivo. “Participar en investigaciones europeas nos permite anticiparnos a las necesidades que demandarán nuestras empresas a medio plazo”, explicó Sancristóbal. “Así, cuando la industria solicita soluciones innovadoras en materias como los gemelos digitales o la robótica, nosotros ya tenemos experiencia para aterrizar con éxito los proyectos y que se consiga realizar la transferencia de tecnológica en el menor plazo posible”, matizó.
En ese sentido, a modo de ejemplo, cabe significar que CTC participó en un programa de excelencia de capacitación tecnológica sobre gemelos digitales en el ámbito industrial hace más de cinco años, “cuando nadie se planteaba ese concepto como un elemento importante para la industria”.
Esa capacidad de anticipación a los retos tecnológicos del futuro, unida al momento de máxima intensidad presupuestaria de programas europeos, como Next Generation EU o el primer tramo del Programa Marco Horizonte Europa, han abierto un caudal de oportunidades para CTC. “Las directrices de acuerdos como el Pacto Verde Europeo o la Estrategia Industrial de la UE son una vía para incrementar nuestro volumen de negocio”, dijo Sancristóbal.
El crecimiento experimentado por CTC obliga a la incorporación de más personal investigador para poder desarrollar nuevos proyectos. En lo que llevamos de año, el centro ha incrementado su plantilla un 20%. Además, todas las incorporaciones realizadas corresponden a perfiles formados en la Universidad de Cantabria.
“Estamos generando empleo de calidad y contribuyendo a que el talento que se forma en nuestro sistema universitario encuentre una salida profesional sin tener que abandonar Cantabria”, comentó la directiva del centro. “Nuestra previsión es continuar creciendo hasta final de año, por lo que invitamos a todos los profesionales técnicos interesados a que apliquen a nuestras ofertas laborales”.
Cinco nuevos proyectos europeos en seis meses
La creciente actividad en proyectos europeos de innovación supone un factor decisivo para la especialización tecnológica que caracteriza la actividad de CTC. En lo que llevamos de año, el centro ha firmado su participación en cinco proyectos europeos que movilizarán un presupuesto de más de 16 millones de euros.
DataWise, cuya reunión de lanzamiento ha tenido lugar a finales de la semana pasada en Grecia, es el más reciente de todos. Se trata de un proyecto vinculado al programa HORIZON y financiado con 5 millones de euros, cuyo propósito diseñar y definir una plataforma que utiliza inteligencia artificial y análisis avanzados para gestionar y optimizar las operaciones de los edificios a lo largo de su ciclo de vida
El consorcio cuenta con 16 socios de 7 países europeos. Entre ellos hay cuatro españoles que son la Fundación CIRCE, la Politécnica de Valencia, la empresa cántabra VBE-6D y el Centro Tecnológico CTC. Gracias a esta investigación, se desarrollará una herramienta integrada y escalable para gestionar eficientemente aspectos como la flexibilidad y gestión térmica de las construcciones, la previsión de energía, la sostenibilidad inteligente y el confort para las personas o la evaluación preventiva de los riesgos de los edificios y de su ciclo de vida.
Para ello, se realizarán varios pilotos en centros educativos, deportivos y comunidades energéticas que faciliten el testeo de esta plataforma.